12:31 p. m. · 30 dic. 2023
Milei ha regresado al 1975, por lo visto le sobran los últimos 50 años de ciencia económica. Por otro lado es normal para una persona que padece un trastorno paranoide obsesivo. En marzo de 1975 Friedman se encuentra con Pinochet, el dato es muy conocido, le habló de política económica y de la "famosa terapia de choque”. Cuando Pinochet recibe a Hayek en noviembre de 1977, hablan de otro tema: la espinosa cuestión de la democracia limitada y del gobierno representativo. Pinochet, según la prensa chilena, lo ha escuchado atentamente y le ha solicitado que le haga llegar los documentos que ha redactado sobre esta cuestión. Al regresar a Europa, Hayek le hizo enviar a su secretario un borrador de su “modelo de constitución”, un texto que justifica principalmente el estado de excepción. Y escribió en el Times de Londres en defensa del régimen y contra las calumnias: “No he encontrado a nadie, en ese Chile tan vilipendiado, que no estuviera de acuerdo en decir que la libertad personal es mucho mayor con el Gobierno de Pinochet que con el de Allende. Ni que decir tiene, que quien se atreviera a sostener públicamente lo contrario, es más que probable que hubiera desaparecido." En su segunda visita, en abril de 1981, Hayek concedió una larga entrevista al periódico El Mercurio. Por cierto el propietario del Mercurio Agustín Edwards fue uno de los principales responsables de convencer a Nixon del golpe de estado contra Salvador Allende.
Una periodista claramente pinochista, le preguntó: ¿Qué piensa de las dictaduras? Su contestación fue: “Muy buena pregunta. Gracias por habérmela hecho. Disertemos un poco. Y bien, yo diría que, como institución a largo plazo, estoy totalmente en contra de las dictaduras. Pero una dictadura, una forma de poder dictatorial puede ser un sistema necesario en un determinado momento en algún país y solo por cierto tiempo. Como usted comprende, a un dictador le es posible gobernar de un modo liberal y es igualmente posible que una democracia gobierne con una falta total de liberalismo. Personalmente, prefiero a un dictador liberal antes que un gobierno democrático sin liberalismo… Le repregunta la periodista: Lo que significa que, durante los periodos transitorios, usted propondría Gobiernos más fuertes y dictatoriales… Hayek: En tales circunstancias, es prácticamente inevitable que alguien tenga poderes casi absolutos. Poderes absolutos que debería utilizar precisamente para evitar y limitar que nadie imponga un poder absoluto en el futuro. Ya vemos los referentes ideológicos de Milei antes liberalismo que democracia. Al despreciar las lecciones de la ciencia económica de los últimos 50 años, Milei no se ha enterado que el mundo ya sabe que se necesita romper definitivamente con la economía neoliberal. El neoliberalismo, bajo cualquier circunstancia , no es ninguna solución, sino el problema, siempre lo ha sido. Los neoliberales a estas alturas son negacionistas al borde del terraplanismo, Alguien dijo "El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos". Milei, Trump, Bolsonáro, Aznar, Ayuso, Feijoo, Moreno Bonilla. El objetivo no es solo la aniquilación física del oponente, sino que persigue el sometimiento moral e intelectual, la construcción de percepción, de engaño, de imaginarios colectivos, afectando no solo las creencias y las costumbres sino imponiendo una realidad virtual, difundida por las cloacas mediáticas compradas. Lo “nuevo” no puede salir de quienes representan los intereses del gran capital concentrado en unos pocos fondos accionistas de todo, o estar sometido a las órdenes del Fondo Monetario Internacional que su único interés es preparar el terreno para el saqueo de los intereses empresariales norteamericanos. Milei ya se ha retratado, no considera oportuna la incorporación de la República Argentina al BRICS como miembro pleno a partir del 1 de enero de 2024. Eso significa que prefiere la esfera anglosajona, es una decisión ilógica al perder la posición privilegiada de sentarse en la misma mesa con mercados importantísimos e incluso sin la necesidad de depender exclusivamente del dólar. Esa decisión solo tiene sentido si está pensando en su jubilación dorada. Si añadimos su megalomanía aguda , además de narcisista, arrogante y una falta severa de empatía. Aquí esta la raíz de su Ultraliberalismo, tiene serias dificultades en adaptarse en entornos sociales con normas preestablecidas, con las leyes, los derechos individuales o el bienestar colectivo. Una bomba de relojería para los pobres argentinos.

Comentarios
Publicar un comentario